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Hugo Adan
No solo los líderes de gobiernos y partidos desde 1980 hasta el 2000, temen la verdad de la CVR, también le teme el gobierno actual y, lo que es peor, la verdad es temida por los propios miembros de la CVR. Este artículo pinta el contexto al informe postergado para septiembre y lo describe como contexto favorable a la impunidad. Ojalá se imponga la verdad e inicie un proceso de reconciliación, es nuestro mayor deseo.
No es solamente el miedo de los gobiernos y partidos envueltos directamente en la violencia política (AP, APRA y partidos de Fujimori) es también el miedo de instituciones tutelares del estado como las FF.AA., el poder judicial y hasta la iglesia de Huamanga, donde el obispo Cipriani oculto el atropello a los DD.HH. Y es además el miedo del actual gobierno que teme se deslegitime un poder militar que hoy necesita mas que nunca para poder imponer las recetas neoliberales y la consiguiente miseria y represión del pueblo.
Es, finalmente, el miedo de algunos miembros de la CVR que han venido cediendo al chantaje de la prensa y del gobierno actual, desde el momento en que llegaron a decir que FF.AA. y los subversivos comparten el mismo grado de responsabilidad en el crimen, la tortura, la violación de derechos humanos y la desaparición de dirigentes comunales y dirigentes laborales. Esa concesión de algunos miembros de la CVR al terrorismo de Estado y en favor de la impunidad a las FF.AA. y sus guerra sucia, reflejo el impacto de la sistemática campaña de ablandamiento a la que fue sometida la CVR.
Cuando miembros de la CVR hicieron tal declaración mostraron que habían cedido al chantaje del llamado rebrote terrorista, a la campaña de la intimidación de la DIRCOTE que inflo dicho fenómeno para vender la falsa imagen seguridad que asocian con las FF.AA. y el consiguiente perdón e impunidad para estas. Se mostró así que dio resultado la manipulación grosera de la prensa en contra de la CVR, lo que continuo hasta las recientes distorsiones de lo dicho y actuado por Ciurlizza, el Presidente Ejecutivo de la CVR (a este acoso se presto Hildebrandt), a quien casi linchan ideológicamente por el solo delito de haber escuchado la declaración de los presos políticos envueltos en la violencia terrorista. Así se sesgo la opinión nacional en favor de la impunidad para las FF.AA. y su terrorismo estatal. Y en favor también a la impunidad para los líderes políticos que estuvieron directamente envueltos en este pasado de vergüenza y asco.
Hoy, el chantaje del gobierno va mas lejos; ya no solo exige que se coloque en el mismo plano a ambos terrorismos, sino que ahora pide a la CVR que destaque la responsabilidad mayor de los subversivos en la guerra sucia. Por esto Toledo se niega a asistir a la ceremonia en Huamanga a fines de mes, y aduce para ello pretextos nimios, cuando en realidad se trata de un chantaje en favor de la impunidad. De aquí el anuncio de la postergación del informe.
Solo inflando cifras, se pudo decir que las FF.AA. comparten con Sendero Luminoso el mismo nivel de responsabilidad en el crimen, la tortura, desaparición y asesinato de líderes sindicales. Hoy la CVR tiene que probar que existen tales 60,000 víctimas, como lo exige un Senador del APRA. Y probarlo en momentos en que ha nacido una santa alianza política para falsificar la verdad y favorecer la impunidad. El gobierno, el APRA y los partidos de derecha AP-UN no solo exigen se exonere de culpa a las FF.AA., sino que se perdone también a los políticos actuales que están envueltos en esos atropellos a los DD.HH. A esto llaman reconciliación nacional, estos miserables.
Y mientras se cocino lo de la postergación del informe de la CVR, se usa el asunto para renegociar repartos de torta en las comisiones de congreso, a la vez que se pasa a segundo plano la creciente corrupción (familia de Toledo incluida) del gobierno actual. Este es el contexto de espera al informe de la CVR en septiembre.
Hay, en suma, un miedo a la verdad que viene de arriba hacia abajo, que cruza una amplia gama de sectores sociales e instituciones del país y que favorece la impunidad y desfavorece cualquier proyecto real de reconciliación nacional. Dado este contexto, solo cabe esperar el informe de la CVR y enterarnos de la forma como la verdad ha sido mutilada en el país. Alguien dijo que la verdad a medias es la peor mentira. Ojalá la de esta CVR no lo sea.
Publicado en indymedia - Perú (http://www.peru.indymedia.org) 15-08-2003
